Chile. San Pedro de Atacama: perdidos en el desierto

Tras un largo viaje de 24h desde Santiago en autobús llegamos a Calama y de allá tomamos otro bus que nos llevaría finalmente a San Pedro. Nada más empezar el trayecto entras inmediatamente en el desierto de Atacama, el desierto más árido del mundo dicen, y el cambio de panorama es tan radical que cuesta acostumbrar los ojos.

San Pedro de Atacama es un pueblito de adobe en un pequeño oasis en medio del desierto. Es el centro neurálgico de  todo turista o viajero que quiera conocer todas las maravillas que rodean el valle.

Como buenos exploradores y aventureros que somos, emprendimos, a la mañana, un pequeño viaje en bicicleta para descubrir todos los tesoros escondidos en el desierto. La empresa era complicada, teníamos poco tiempo y muchas ganas de conocer. Pukara de Quitor, Quebrada del diablo, el túnel de la vieja carretera, Valle de la Muerte, Valle de la Luna... el paseo era ambicioso para una jornada. Al final del día.....que podemos decir, nos perdimos en el desierto, dos veces!!! Finalmente no vimos casi nada de lo planteado, pero estar perdido sin saberlo y creer que visitas lugares al tiempo que estas en medio de ninguna parte también es una experiencia.

No todo fue sufrir perdido, nos dio tiempo a rutas ligeritas para disfrutar del horizonte desértico y salado y llegar a lagunas salinas para flotar ingrávidos, ahogar el cansancio y sumergirte en el relax.

Esta vez no nos hizo falta conocer a nadie en la parada, porque nos encontramos por casualidad a viejos amigos de Valpo, Dominik y Carlos, muy divertido toparnos así.

Nos vamos de Atacama con la sensación de una pequeña aventura en la que hubo un poco de cada cosa y sobretodo que nos quedó mucho por ver, una buena excusa para volver. 

Paisaje-desierto-oasis

Entre el cielo y la tierra

¡A la aventura!

Contrastes del desierto

Vale tío, ¿!¿!dónde "weas" estamos!?!?

A veces pasa que estas siguiendo un camino, o eso crees, y te empeñas en que es el camino correcto, no te has podido equivocar. A veces tienes que cruzar un río 4 veces con la bicicleta al hombro, que se acabe el camino, andar por un pedregal para empezar a pensar que estas perdido. Sí, estás perdido. 

La NO quebrada del diablo

Otras veces vas por el camino correcto y llegas a una encrucijada, sabes que tienes que girar a la izquierda, pero decides fiarte de tu instinto. Maldices a tu instinto cuando dos horas mas tarde sales a una carretera a 20 km de tu destino después de deambular 2 horas por tu valle de la muerte, que no el original.

El NO valle de la muerte

Pero hay que decir que nos gustó perdernos.

Laguna Cejar

Quebrada del diablo esta vez SI

Así se acaba una travesía

Adiós Chile ya te dejamos por un tiempo. Cambiamos de país.